Visita al castillo de Osaka y paseo por Umeda

Kara Ema:

El lunes estuvo feo el día —nublado e intermitentemente lluvioso— así que decidí no hacer demasiado y no alejarme mucho.

Salí del hotel cerca del mediodía.

Primero fui a un Lawson que tenía una parte para sentarse a comer adentro. Me pedí algo para comer y me quedé ahí un par de horas con la compu.

A las 14:00 caminé hasta un Starbucks. En el camino me crucé con:

Niñas pequeñas andando solas por la calle
Un panel para cubrir una obra en construcción, decorado de la mejor forma posible: con dibujos hechos por niños.
Lo que me pedí en Starbucks: Frappuccino de caramelo y dona (¥981; ~US$6)

A las 17:00 volví al hotel.


El martes estuvo nublado también, pero al menos ya no llovía. Así que decidí hacer lo que tenía originalmente planeado para el lunes: ir a visitar el castillo de Osaka.

El castillo de Osaka (大坂城・大阪城 Ōsaka-jō) es un castillo japonés ubicado en Osaka, Japón. Originalmente llamado Ōzaka-jō, es uno de los castillos más famosos del país y desempeñó un papel importante en la unificación de Japón durante el período Azuchi-Momoyama del siglo XVI.

El castillo cubre una superficie de aproximadamente un kilómetro cuadrado, dentro del parque público del Castillo de Osaka (大阪城公園 Ōsaka-jō kōen). Fue construido en dos plataformas de terreno rellenado, con murallas a base de piedras cortadas, y está rodeado de un pozo con agua de manera similar a los castillos europeos. El castillo tiene ocho pisos interiores (accesibles por medio de un ascensor), y cinco pisos exteriores, y fue construido sobre una base de piedra alta para proteger a sus ocupantes de atacantes con armas blancas.

Wikipedia

Salí del hotel a las 11:00 y arranqué a caminar hacia el castillo. Por suerte no necesité tomarme ningún medio de transporte dado que mi hotel estaba a menos de media hora a pie.

Cuando llegué compré una entrada combinada de ¥1300 (~US$8) que incluía el acceso al castillo, al jardín Nishinomaru y a la torreta Inui-yagura.

Castillo de Osaka
Jardín Nishinomaru
Torreta Inui-yagura
Grupo de escolares frente al castillo. Extraño cuando visité Kansai por primera vez en 2022, que era yo solo con los escolares; ahora los sitios turísticos están llenos de turistas de vuelta.
Castillo frente a grupo de escolares
Reproducción de una batalla entre dos ejércitos samuráis
Vistas desde el observatorio en el último piso del castillo (I)
Vistas desde el observatorio en el último piso del castillo (II)
Vistas desde el observatorio en el último piso del castillo (III)

A las 12:30 ya había recorrido los tres sitios pagos que te mencioné más arriba, así que ahora me tocaba recorrer los gratuitos, incluyendo todas las zonas verdes que rodeaban los terrenos del castillo.

Un camino flanqueado por vegetación cerca del castillo

En un momento me topé con un festival de gyoza, donde había varias tiendas vendiendo distintos tipos de gyoza. Paré para comprarme unas gyoza de queso.

Festival de gyoza
Tiendas vendiendo gyoza en el festival
Las gyoza que me compré (cuatro gyoza a ¥700 [~US$4] es caro, pero no todos los días encuentro un lugar que venda gyoza de queso).
Kyoikuto (教育塔; Torre de la Educación)

El Kyoikuto, o Torre de la Educación (en japonés: 教育塔; o きょういくとう, literalmente «Torre de la Educación») es una torre conmemorativa situada en el Parque del Castillo de Osaka, en Chuo Ward, ciudad de Osaka. Sirve como monumento a las víctimas del tifón Muroto de 1934.

En la mañana del 21 de septiembre de 1934, el tifón Muroto azotó la región de Kansai. El tifón golpeó durante el horario escolar, y muchos edificios escolares de madera fueron destruidos, causando la muerte de más de 600 niños, y 25 empleados de la escuela. Inmediatamente después del desastre, la comunidad educativa de Osaka esperaba que una catástrofe así no volviera a repetirse, y propuso la construcción de un monumento para conmemorar a los niños y empleados de las escuelas que murieron en el desastre. […]

Wikipedia
Foso del castillo

A las 14:30 volví al hotel.

Volví a salir a las 21:30 con la idea de ir a cenar a Torikizoku, a una cuadra del hotel.

Una leche con chocolate que me pedí de postre en Torikizoku

Una hora más tarde ya estaba de regreso en el hotel.


El miércoles salí del hotel a las 11:00 y me fui caminando hasta un parque llamado Ōgimachi, situado al lado del llamativo edificio de Kids Plaza, un museo y centro de entretenimiento para niños.

Parque Ōgimachi y edificio de Kids Plaza
Otro ángulo
Juegos en el parque Ōgimachi

A las 12:00 pasadas continué mi paseo y acabé en Umeda, uno de los sitios más céntricos de Osaka con ochos cientos cincuenta mil tiendas, calles comerciales, pasajes subterráneos, centros comerciales, etc. No era mi primera vez en la zona; así y todo descubrí varios lugares que no había visto antes, empezando por este shōtengai (Estreet) donde había un Mandarake:

Shōtengai Estreet

Decidí entrar a curiosear lo que vendían en Mandarake. Me detuve sobre todo en la sección de fotolibros de chicas. Allí encontré un fotolibro de Erika Sawajiri, la primera actriz japonesa que me hizo dar cuenta de lo hermosas que son las japonesas:

Fotolibro de Erika Sawajiri (I)
Fotolibro de Erika Sawajiri (II)

También había uno de Kasumi Arimura, una chica que no conocía pero también me pareció superbonita:

Fotolibro de Kasumi Arimura (I)
Fotolibro de Kasumi Arimura (II)

Siempre que hay un Mandarake suele haber también un Surugaya cerca, así que lo busqué y efectivamente había uno. Me fui para allá.

Una de las cosas que más me llamaron la atención en este Surugaya fueron los juegos y consolas viejos que vendían en sus cajas originales, a precios bastante altos:

Juegos de Pokemon para Game Boy, usados y en sus cajas originales. Se vendían a ~¥15000 (~US$100). La caja era lo que hacía que fuesen tan caros, dado que también vi que vendían los cartuchos sueltos por ~¥2000 (~US$10).
Con la Game Boy pasaba lo mismo: si la comprabas con la caja te costaba diez veces más que comprarla suelta (¥110000; ~US$700).

A las 14:00 me fui a almorzar a un Tully’s. La idea era quedarme ahí varias horas con la compu, pero tan pronto como me senté descubrí que el wifi de esta cafetería no funcionaba. No quería usar los datos de mi teléfono así que decidí moverme a otro sitio que sí tuviese wifi.

Mi almuerzo en Tully’s: espagueti boloñesa.

A la media hora estaba en McDonald’s comiendo mi segundo almuerzo del día, obligado gracias a que Tully’s no tenía wifi. Eso me enseña a no confiar que en todas las cafeterías va a haber siempre internet, mismo cuando haya un cartel que dice que tienen internet gratis.

Mi almuerzo en McDonald’s: chicken nuggets.

Cerca de las 17:00 me fui de McDonald’s y arranque la caminata de regreso al hotel.

Fotos de Umeda que tomé en el camino de regreso (I)
Fotos de Umeda que tomé en el camino de regreso (II)

Dado que había comido dos almuerzos, decidí saltearme la merienda e ir directo a por la cena: una pizza de Domino’s. La pedí por internet y la fui a buscar a las 22:00 para comer en el hotel.

Mi cena: pizza de Domino’s.

El jueves —hoy— hice el check-out del hotel a las 10:00 y me vine a St. Marc Café a quedarme por un par de horas hasta que se haga la hora de hacer el check-in en el sitio donde me estaré quedando desde hoy.

Por suerte en este café sí tenían un wifi que funcionaba.

Ame,
Kato