Kara Ema:
El miércoles cerca de las 7:30 cogí la bici y me fui para el kinder.
Me dieron de desayunar en el cuarto piso, y luego bajé a juntarme con los niños de 3 años, que estaban esperando para subirse a la camioneta.
Es que el programa para hoy se trataba del mismo que ayer: excursión al museo de Nghệ An, solo que esta vez iríamos con niños más pequeños.
Si la jornada de ayer fue agotadora, esta lo fue el doble. Pero también fue el doble de adorable.
Los niños de 3 me buscaban mucho más que los de 4 y 5. No paraban de llamarme diciéndome «Teacher! Teacher!» y de querer mostrarme cosas, decirme algo, preguntarme algo, o simplemente tomarme de la mano.
En un momento, cuando terminamos de recorrer el museo y nos quedamos en el lobby del primer piso un rato descansando, varios de los niños me seguían y querían jugar conmigo.
Por ejemplo esta niña no paraba de agarrarme las piernas para que no me pudiese mover:
Más tarde se me ocurrió decírles a los niños que pusieran todos sus manos juntas arriba de la mía, así hacía una foto de la montaña de manos:
A las 10:00 estábamos de vuelta en el aula, jugando a armar estructuras de bloques.
Los varones fueron directo a jugar con los bloques, mientras que las niñas pasaron antes por el baño. Al parecer se bañaron, ya que vi que una de ellas estaba desnuda y noté que todas se habían cambiado de la camiseta verde a la azul.
A las 11:00 almorcé en el cuarto piso.
Una hora más tarde estaba de regreso en el hotel.
A las 19:30 me pasó a buscar Hùng con su Mercedes y toda su familia. Me dijo que me llevaría a cenar a un restorán para darme de probar una nueva comida, y que quería que durante el mes que estuviese aquí probara la mayor cantidad de comida vietnamita posible.
Esta vez probé un plato llamado bún chả nướng.
El bun cha es un plato vietnamita que incluye fideos, hamburguesas de cerdo asadas sobre carbón y un plato de salsa de pescado agridulce, picante y salada. El plato es originario del norte de Vietnam y es el regalo más perdurable de Hanoi, por lo que puede considerarse una de las especialidades típicas de la cocina de Hanoi. El bun cha es similar a los fideos de carne a la parrilla en el centro y el sur, pero la salsa de pescado mezclada tiene un sabor más suave.
Wikipedia
Una hora más tarde pasamos por una cafetería para pedirnos todos un café para llevar. Me divierte mucho el hecho de que Hùng vaya todos los días a cafeterías al menos dos veces. Le pregunté si le gustaba trabajar desde las cafeterías y me dijo que sí porque «allí hay café mientras que en mi casa solo hay agua» (mentira, también hay cerveza rusa).
No tengo foto de lo que me pedí esta vez, pero básicamente se llamaba Ô long B’lao sữa y consistía en una bebida fría de té oolong con leche y bolitas de tapioca.
A eso de las 21:00 me dejaron de vuelta en el hotel.
Ame,
Kato
Cuanta comida nueva!