Conviviendo con una familia islandesa

Kara Ema:

El domingo hice el check-out en el hotel.

Como habíamos quedado, a las 14:00 me pasó a buscar Stefán para llevarme a su casa, donde estaré viviendo durante las próximas cuatro semanas.

La situación familiar y los integrantes de la casa es algo un poco complejo, pero antes de contarte lo que estuve haciendo con ellos creo que sería bueno empezar por quiénes son.

IntegranteRelaciónEdadNacionalidad
StefánPadre? (30-40 quizás)Alemana
FreyjaMadre? (30-40 quizás)Islandesa
SvalaNiña (I)11Islandesa
DrifaNiña (II)9Islandesa
ÍrisNiña (III)7Islandesa
GyðaNiña (IV)5Islandesa
KisaGato13Islandesa
LokiPerra7Islandesa

Además de lo que pone el cuadro, hay ciertos detalles adicionales importantes a saber:

  • Stefán y Freyja están separados, pero decidieron que lo más conveniente sería seguir viviendo juntos, al menos por el momento.
  • Freyja es el tercer matrimonio de Stefán. Drifa, Íris y Gyða son hijas de ambos.
  • Svala es hija de Stefán y su segunda esposa. Viene a lo de su padre cada jueves por medio y se queda hasta el lunes. El resto del tiempo vive con su madre.
  • Stefán tiene una quinta hija (su primogénita) con su primera esposa. Tiene 25 años y ya no vive más con sus padres.

Viste, te dije que era una situación compleja, pero creo que como lo describí se entiende bastante bien.

Por cierto, algo interesante de Islandia es la forma en que funcionan los apellidos. El apellido de todas estas niñas es Stefánsdóttir, que literalmente significa «hija de Stefán». Tengo entendido que también podrían haber optado por usar el nombre de la madre para los apellidos de sus hijas.

Cuando entré a la casa vi que estaban tres de las niñas en el salón, así que las saludé desde el vestíbulo. Me devolvieron el saludo con un dejo de apatía y desgano, que es la actitud que muchos de los niños occidentales suelen mostrar para con los adultos, al menos al principio cuando no los conocen.

A la cuarta niña me la encontré más tarde en su cuarto, mientras el padre me estaba haciendo un tour por toda la casa. Le pregunté cómo se llamaba y qué edad tenía. Ahí fue cuando me di cuenta de que las niñas hablaban menos inglés del que esperaba, dado que Drifa (9 años) no me entendió el «how old are you?».

Aparte de la familia había una persona más en la casa: un polaco llamado Piotrek que, al igual que yo, había venido a ayudar a la familia con los quehaceres diarios. Piotrek había estado viviendo con ellos por dos meses, y el lunes por la tarde tendría el vuelo de regreso a Polonia.

Ahora empecemos a meternos en la casa describiéndote cómo es y mostrándote algunas fotos. Son dos plantas. La planta baja es el área principal de Stefán, mientras que la alta es la de Freyja. En la planta baja encontramos el vestíbulo, el salón, la cocina, el garaje, un baño, la habitación de Stefán y mi habitación. En la planta alta hay otro salón, otro baño, las habitaciones de las niñas, la habitación de Freyja, y finalmente el lavadero. Como verás es una casa bastante grande, con lo cual no tienen problema en acomodar siete personas y dos mascotas.

Vestíbulo (donde dejas tus abrigos y tus zapatos antes de pasar al salón).
Salón de la planta baja
Cocina
Baño de la planta baja
Salón de la planta alta
Lavadero
Baño de la planta alta
Mi habitación
Habitación de las dos niñas mayores
Habitación de las dos niñas menores

Hay algo que debería llamarte la atención en las fotos de las habitaciones de las niñas; bueno, al menos a mí me la llamó. El desorden obviamente no, dado que viviendo con niños (sobre todo con cuatro) eso es prácticamente inevitable. ¿Entonces qué?

Imagínate el cuarto estereotípico de una niña, con todas las paredes y las sábanas de color rosa, con pósteres de princesas Disney (o de algún cantante masculino si es un poco más grande), con muñecas LOL y Barbie. No había nada de esto en los dormitorios de estas niñas.

De hecho, no he visto muchos juguetes en toda la casa. En lugar de juguetes, lo que sí tienen bastante son juegos (de mesa y de cartas) y libros. También, una cosa que me encanta es que la casa está decorada con obras de arte realizadas por las niñas.

Obras de arte de las niñas (I)
Obras de arte de las niñas (II)
Obras de arte de las niñas (III)

Hay dos cosas de la estructura de la casa que me hicieron acordar a las escuelas islandesas. Una es el uso de muchas ventanas grandes y sin cortinas, lo que permite no solo que entre la luz solar sino también hace que la comunidad que te rodea se sienta más cercana, dado que puedes ver a tu vecino y tu vecino te puede ver a ti. La segunda cosa es el uso de chapa metálica para la parte de afuera de la casa. Si bien no todas las casas en Islandia son así (algunas son de madera), la chapa parece estar muy presente aquí como material de construcción.

Después de que Stefán me diese el tour por la casa, me invitó a jugar una partida de pool con él. Nunca aceptes una partida de pool contra una persona que tiene un pool en su casa, a no ser que quieras perder. Metió todas sus bolas en el mismo turno y me ganó. Fue la partida más corta que vi en mi vida. Más tarde jugué contra Piotrek, quien me ganó también.

A eso de las 18:00 me puse a ver qué juegos tenían.

Algunos de los juegos que tienen (están guardados en tres sitios diferentes del salón; este es solo uno de ellos).

Noté que tenían el Ligretto, así que le ofrecí a Stefán de jugar. Las niñas se quisieron sumar también, así que hicimos varias partidas.

Jugando Ligretto con las niñas

En un momento Drifa me mostró cómo tocaba el piano.

Drifa (la de 9) tocando el piano en el salón

A las 20:00 cenamos unas pizzas caseras. Éramos todos los que te mencioné arriba y la novia de Stefán, que también había sido invitada a la pizza party.

La pizza que me preparé yo con todos los ingredientes que había

A las 21:00 terminó la fiesta y me fui al salón de arriba, donde me habían preparado para dormir en el sofá, dado que mi cuarto todavía estaba siendo ocupado por Piotrek.

A mitad de la noche me desperté con Kisa ronroneándome en la cara. Amo a este gato; es demasiado cariñoso.


El lunes a las 6:15 salimos con el coche. Éramos Piotrek, Freyja y yo. Freyja conducía. A los quince minutos llegamos al sitio donde Freyja trabaja. Freyja se fue a trabajar, y Piotrek y yo nos volvimos para la casa. Piotrek conducía.

A eso de las 7:00 volvimos a salir a la carretera. Esta vez éramos Piotrek, Svala y yo. Piotrek conducía. El objetivo era llevar a Svala a la casa de su madre, en un pueblo al sur de Reikiavik, a una hora en coche desde la casa del padre.

A las 8:00 pasadas dejamos a Svala, y Piotrek me ofreció tomar el volante a mí. Hacía tres años que no manejaba, y nunca lo había hecho sobre carreteras cubiertas de nieve. Pero una de mis tareas en casa de Stefán iba a ser justamente hacer este trayecto de una hora en coche, con lo cual tarde o temprano tendría que conducir. Acepté el desafío de Piotrek y me senté en el asiento del conductor, mientras él se fue atrás a descansar un rato. A mitad de camino decidimos que yo había tenido suficiente práctica y él suficiente descanso.

Cuando llegamos de vuelta a la casa noté algunas cosas que no había visto antes, como:

Esto es muy islandés, y hace referencia al hecho de que tienes que ducharte desnudo antes de entrar a la piscina pública.
Horario escolar de Drifa — Algunas de las clases que tiene: inglés, islandés, natación, arte, ciencias, danza, piano, tecnología. Una interesante es Útikken que significa «afuera»; imagino que será dejar a los niños salir al patio y jugar libremente en los juegos por una hora y media.
Horario escolar de Íris — En este se puede ver los dos recesos largos que tienen, uno a las 9:35 para comer un refrigerio y el otro a las 11:40 para el almuerzo. Íris tiene natación (Sund), deportes (Íþróttir), proyectos (Verkgreinar) y clases generales (Bekkjartími).

A las 11:00 salimos a pasear a la perra, Loki. Hacía mucho frío y mucho viento. Decidimos ir hasta la pequeña cascada que quedaba cerca, a unos diez minutos de caminata.

Paseando a Loki
Cascada
Loki en la nieve

A Loki parece que le encanta la nieve. Se la pasaba jugando con ella, metiendo el hocico e incluso comiendo algunos pedazos.

A las 12:30 me preparé mi almuerzo: unas pylsur (salchichas islandesas) en pan y con un poco de aguacate para acompañar.

Mi almuerzo del lunes

A las 13:00 subí para ver dónde estaba Kisa y cuando me lo encontré lo subí al sofá para sentarme con él y acariciarlo un rato. Luego me lo llevé conmigo para abajo. Es por lejos el gato más hermoso y cariñoso que conocí en mi vida. Hasta me deja acariciarlo en la barriga y darle besos en la boca, cosa que jamás había podido hacer con otros gatos. Loki (la perra) también es hermosa y superamigable.

Kisa
Kisa dejándome acariciarle el vientre

Ayudé a Piotrek con algunas cosas de la casa, por ejemplo a pasar la aspiradora por todo el salón y la cocina. Esta era una de las tareas que él tenía que hacer y que me van a tocar hacer a mí a partir del martes cuando él ya no esté.

Cerca de las 14:00 volvió Drifa de la escuela, caminando sola los veinte minutos y 1,3 kilómetros que hay entre su casa y su colegio.

A las 14:30 Piotrek se fue con el coche a buscar a Freyja al trabajo. Luego Freyja lo llevaría hasta el aeropuerto. Me quedé solo con Drifa.

Dos horas más tarde llegó Freyja con sus dos hijas menores.

A las 17:00 me puse a jugar al Ligretto con Gyða.

Jugando al Ligretto con Gyða

Drifa también se sumó al juego. Jugamos varias partidas mientras Freyja e Íris se duchaban.

En un momento apareció Íris desnuda en el salón, recién salida de la ducha. Después de cenar las tres niñas se quedaron en ropa interior, presumiblemente porque así es como irían a la cama. Ninguna de estas dos cosas habría pasado nunca con las hijas de mi amiga vietnamita. Es interesante notar estas diferencias socioculturales en cada familia con quienes me quedo.

Hablando de diferencias, otra más que noté es la siguiente. Estas niñas islandesas eructan relativamente seguido, estando enfrente de mí o de los padres, quienes no las regañan en absoluto. Es como si los eructos no fuesen malos modales aquí, o al menos fuese algo tolerable en los niños. Otras cosas que he observado aquí y que las hijas de mi amiga vietnamita jamás habrían hecho son: Gyða (la de 5) dejando escapar gases al lado mío, e Íris (la de 7) yendo al baño a hacer pis sin cerrar la puerta.

A las 22:00 me fui a mi cuarto y me puse a ver un nuevo capítulo de Alice in Borderland. Kisa me vino a acompañar e incluso durmió conmigo. Esto me hizo acordar a cuando vivía con mi amiga francesa, sus hijas y la gatita que habían adoptado, quien siempre elegía dormir conmigo.

Viendo Alice in Borderland en la cama, antes de irme a dormir.

Ame,
Kato