Ciudad Quezon, Makati y cementerio de Manila

Kara Ema:

El sábado salí de casa a las 9:30. Caminé durante una hora hasta Taft Avenue.

Cartel en una iglesia protestando contra la propuesta de ley del divorcio (el divorcio es actualmente ilegal en las Filipinas).

En Taft Avenue me tomé la Línea 3 del MRT (₱28; ~0,4€) hasta la terminal, North Avenue, en Ciudad Quezon.

MRT Línea 3 en Taft Avenue

Ciudad Quezon (en tagalo: Lungsod Quezon; en inglés: Quezon City o QC), la ciudad más poblada de la República de Filipinas, es el centro urbano más rico del país. Está a una distancia aproximada de 12 kilómetros al noreste de Manila, la capital del país, con la cual forma el mayor conglomerado urbano del país. La ciudad posee numerosos parques, alamedas y áreas comerciales.

Wikipedia

Frente a la estación donde me bajé había un centro comercial llamado Trinoma. Entré más que nada para ir al baño, dado que mi plan para el día no era pasármelo en un mall.

Trinoma (I)
Trinoma (II)

A las 11:30 caminé por un rato. Mi plan original —la razón por la que había venido a Ciudad Quezon— era visitar los barrios bajos de la ciudad, pero estaban algo alejados de donde me encontraba. Seguramente había algún jeepney o autobús que podía tomar para ir, pero no sabía bien cuál ni dónde tenía que tomarlo.

Avenida Quezon

Al final decidí volver a Manila utilizando el mismo MRT, aunque esta vez las estaciones en las que me subí y me bajé fueron diferentes: Quezon AvenueGuadalupe (20₱; ~0,3€). Me bajé unas estaciones antes cosa de volver al hotel pasando por Makati en lugar de pasar por Pasay.

Carretera Panfilipina vista desde la salida de la estación de Guadalupe

A las 13:00 pasé por un Wendy’s y me pedí una doble baconator (₱390; ~6€). Hacía un montón que no comía en Wendy’s y me tenté cuando lo vi.

Ciudad de Makati

Paseando por Makati a las 14:00 me topé de casualidad con Manila South Cemetery (Cementerio sur de Manila). Me acordé del libro que había visto en Dávao, el cual mostraba una foto de una niña viviendo en un cementerio de Manila y durmiendo arriba de una tumba. Decidí entrar a echar un vistazo.

No tardé en cruzarme con los niños.

Niñas viviendo en el cementerio (esos paneles de madera que ves detrás de ellas eran su casa).
Interior de la casa de las niñas
Casa de una persona viviendo entre las tumbas

Cada vez me fui topando con más y más niños, sobre todo cuando se me empezó a correr la voz de que había un extranjero repartiendo chupetines a los niños del cementerio.

Los niños del cementerio
Niños mostrándome sus lenguas pintadas por los chupetines
Niños trepando tumbas y saltando de una a la otra
Niños haciendo stand-by en las tumbas

Este grupo de niños que ves en la última foto fue el que me acompañó en mi caminata por casi todo el cementerio.

Los varones un par de veces se bajaron los pantalones y me mostraron sus partes de adelante y de atrás. También hicieron gestos sugerentes relativos a la masturbación y mencionaron la palabra kasarian, que significa «sexo» en tagalo. Las niñas por su parte simplemente se reían o exclamaban «ewww».

Estos niños también me enseñaron el significado del término bold en inglés filipino. «Bold» es una forma argótica y eufemística de referirse a alguien que está desnudo, a una película que contiene desnudez, o bien a contenido pornográfico.

No me sorprendió que estos niños supiesen de estas cosas. Lo que sí me sorprende es la gente que niega rotundamente la sexualidad de los niños a pesar de haber tanta evidencia al respecto, con la cual me he topado una y otra vez en mi interacción con ellos durante mis viajes.

Esta niña no me quiso aceptar el chupetín cuando se lo di, así que se lo dejé en la mesa y me fui. Al cabo de un minuto me di la vuelta y la vi desde lejos con el chupetín en la boca y saludándome con la mano.
Así se baña la gente que vive en el cementerio
La misma niña que me había encontrado al principio. Me la volví a encontrar más tarde y le di un chupetín.

En un momento les pregunté a los niños si habían visto fantasmas (multo), a lo que me contestaron que opo (sí).

Montaje con los niños del cementerio

A las 16:00 me fui del cementerio y media hora más tarde llegué al apartamento.

A las 20:00 me pedí un Grab hacia el aeropuerto (₱357; ~5€).

A las 23:30 embarqué en el vuelo hacia mi siguiente destino.

Ame,
Kato