Celebración de la Fiesta de la Luna en el Palacio de los Niños de Hanói

Kara Ema:

Frase del día en vietnamita

Em gái đang làm gì? Đang bơi khỏa thân ở hồ.
¿Qué está haciendo la hermanita? Está nadando desnuda en el lago.

em gáihermana menor / hermanita
đangestá (indica acción en progreso)
làmhacer
qué
đangestá
bơinadar
khỏa thândesnudo/a
en
hồlago

El domingo en el hotel me puse un rato a hablar con otro huésped. Me contó que venía de Sudáfrica, su novia era vietnamita y actualmente estaba viviendo en Hanói, aprendiendo vietnamita y trabajando en una escuela pública como profesor de matemáticas en inglés.

Cuando me enteré de que era docente le empecé a preguntar un montón de cosas. Me dijo que ganaba 35 millones de đồng (~1100€) por mes trabajando nada más que 15 horas semanales. Que había entre 35 y 55 estudiantes por clase, y que eran tantos que muchos maestros ni siquiera se sabían los nombres de todos. Que no tenía que evaluarlos de ninguna forma (ni darles tarea ni con exámenes)—lo único que tenía que hacer era planificar las lecciones y darlas. A veces le tocaba ir a la mañana, a veces a la tarde, pero nunca más de tres o cuatro horas por día. Tenía que levantarse a las cinco de la mañana para salir con la moto hacia la escuela porque el tráfico si no era fatal y no llegaba.

A las 15:00 salí del hotel con la bici.

Aún no había almorzado, así que la primera misión era encontrar un lugar para comer. Me senté en un taburete sobre la acera y me pedí un bánh tráng cuốn en Bánh Tráng Bé My (₫28k; ~1€).

Bánh tráng cuốn

Esto es muy subjetivo y depende del paladar de cada persona, pero como te dije la otra vez la comida vietnamita es de lo mejor del Sudeste Asiático en mi opinión. En Tailandia me pasaba que muchas veces terminaba en el 7-Eleven porque no veía nada de lo que estaban vendiendo en la calle que me apeteciera; mientras tanto en Vietnam en cada cuadra hay restoranes y puestos de comida vendiendo cosas ricas y baratas como bánh cuốn, bánh mì, nem rán, etc. La comida vietnamita también tiene fama de ser de las más saludables y balanceadas.

Después de almorzar me encontré con Linh y Suong en el hotel Meliá, donde había un evento para niños llamado Trung thu yêu thương (Amor por el Medio Otoño).

Trung thu yêu thương

Resulta que este evento en realidad era con invitación —los invitados al parecer eran familias de empresas participantes—, con lo cual técnicamente estabamos colados, así que nos vinieron a decir que nos teníamos que ir (a pesar de que había dos mesas totalmente vacías).

Fuimos entonces a pasear por la calle aledaña al hotel, llamada Phố Sách Hà Nội (Calle del Libro de Hanói).

Phố Sách Hà Nội
Una librería
Suong interesada por un libro

Había unos estudiantes universitarios que estaban preparando un evento para niños, el cual se celebraría en aquella misma calle a partir de las 19:30. Nos hubiera gustado ir pero ya teníamos planes para esa hora. Lo que sí hicimos fue quedarnos un rato con ellos dado que Suong quería ayudarles pintando los cartones.

Suong ayudando a los estudiantes universitarios a preparar el evento
Suong con una careta de perro hecha a mano por los estudiantes

A las 17:30 me volví con la bici para el hotel mientras que Linh y Suong se fueron con la moto para su casa.

Cerca de las 18:00 llegué al hotel y una hora más tarde volví a salir. Caminé por las calles peatonales alrededor del lago Hoàn Kiếm.

Feria que estaba vendiendo libros con descuentos en las calles peatonales

Quince minutos más tarde llegué a Cung Thiếu Nhi Hà Nội (Palacio de los Niños de Hanói).

Cung Thiếu Nhi Hà Nội

Un día más, un festejo más de la Fiesta de la Luna—esta vez en el Palacio de los Niños. Se llamaba Vầng Trăng Yêu Thương (La luna del amor). La verdad que no podría haber venido a Vietnam en una mejor época, con la cantidad de eventos que hay por estos días (por cierto, fue completamente de casualidad que vine justo para celebrar Tết Trung thu).

El evento arrancaba a las 19:30, pero para cuando llegué diez minutos antes ya estaba todo el auditorio lleno de gente. Los chicos de la Unión de Jóvenes Comunistas Ho Chi Minh que organizaban el evento no me dejaron pasar por la puerta: me dijeron que se trataba de un evento para niños. Me podrían haber dicho que no podía entrar porque no había más lugar, así herían un poco menos mis sentimientos y no caían en el edadismo.

Los de la Unión de Jóvenes que no me dejaron pasar

Me quedé a un costado de la puerta junto con otra gente que quería entrar a ver pero no la dejaron. Al cabo de un rato nos condujeron a unas escaleras y nos terminaron llevando a una puerta trasera en la parte superior del auditorio. Tan pronto como pude entrar me conseguí un taburete y me instalé en el corredor, justo al lado de unas chicas que estaban con su uniforme del colegio (a pesar de ser domingo). Me dijeron que estaban en 6.º grado, con lo cual tendrían 11 años.

Miré a mi alrededor y me di cuenta de que prácticamente toda la audiencia consistía en escolares. Los pocos adultos que había eran seguramente maestros y padres de los niños que habían venido por su cuenta (es decir, no con la escuela).

Al rato llegó Linh con Suong y se instalaron atrás de todo en una esquina. Linh me hizo señas de que fuese con ellas pero yo estaba demasiado cómodo ahí en el pasillo, con vista céntrica al escenario y en compañía de las simpáticas alumnas.

Vista céntrica al escenario
Alumnas sentadas a mi lado, con el clásico pañuelo rojo comunista.

Varias veces a lo largo del evento, estas niñas me llamaron para saludarme y para ofrecerme golosinas. Eran demasiado dulces, tanto como las chuches que me daban. En un momento hasta me dieron un poco de pastel de luna. Yo sentí que tenía que reciprocar tanta gentileza, así que les ofrecí algunas de las golosinas que yo llevaba conmigo (ves por qué es clave tener siempre golosinas a mano).

Lo primero que hicieron fue llamar a ciertos niños a pasar al escenario para recibir premios y reconocimientos. Creo que eran los niños que mejores notas habían obtenido, tanto en el ámbito académico como en el artístico.

Niños recibiendo los premios

El premio consistió en una bolsa de Vinamilk con unas golosinas y unas leches. Lo gracioso es que no era para nada exclusivo este premio porque al final —después de que pasaran estos niños— les terminaron dando una bolsa a cada uno de los chicos que estaban sentados en la tribuna también. Linh incluso recibió un par de bolsas para sus hijas, y me dio una a mí también.

Estudiantes en la tribuna recibiendo las bolsas de Vinamilk

Tras recibir los regalos, un organizador propuso a la audiencia encender la linterna de sus teléfonos. Cuando vi a las niñas sentadas a mi lado haciendo esto, yo también me sumé a ellas haciendo lo mismo con mi iPhone.

Estudiantes encendiendo las linternas de sus teléfonos
Suong levantando sus juguetes con luces (arriba a la derecha).
Niñas en el escenario tocando un instrumento tradicional llamado đàn tranh

El đàn tranh o đàn thập lục es un instrumento de cuerda pulsada de Vietnam, basado en el guzheng chino, del que también derivan el koto japonés, el gayageum y el ajaeng coreanos, el yatga mongol, el kacapi sundanés y el jetigen kazajo. Tiene una caja de resonancia alargada con cuerdas de acero, puentes móviles y clavijas de afinación situadas en su parte superior.

Wikipedia
Niñas bailando (I)
Niñas bailando (II)
Niñas bailando (III)
Montaje del evento Vầng Trăng Yêu Thương

A las 21:00 terminó el evento y me reuní con Suong y Linh. Suong quería ir a jugar un rato a los juegos que quedaban afuera del palacio, así que la dejamos jugar mientras yo charlaba con Linh.

Suong jugando a la rayuela

A las 22:00 nos fuimos. Pasamos por un Mixue, donde yo compré un helado para Suong y para mí (₫35k; ~1€).

Suong tomando el helado

De ahí Linh me dejó con la moto en mi hotel y se fue para su casa con Suong.

Ame,
Kato