Último día en Londres: Natural History Museum y Science Museum (Parte I)

Kara Ema:

Antes que nada, me voy a sacar de encima las novedades sobre la obra de Harry Potter: las novedades son que no hay novedades. Aún no me han respondido, así que ya está confirmado que no podré asistir a esta obra por el momento, desafortunadamente. Me sirve como lección para la próxima: jamás dejar lo mejor para el final. A partir de ahora cada vez que vaya a un McDonald’s me voy a comer la hamburguesa primero, porque si como los patatas antes corro el riesgo de atragantarme fatalmente con una de ellas y no llegar nunca a la mejor parte, tal como me pasó con la obra por haber querido dejar lo mejor para el final. Igual no me quejo, porque salvando este percance todo lo demás me ha salido tal cual lo había planificado, y he llegado a conocer cientos de sitios maravillosos.


Hoy era literalmente el peor día para visitar un museo. Y yo no solo fui a uno, sino a dos: el Natural History Museum (Museo de Historia Natural) y el Science Museum (Museo de Ciencias). Ambos quedan muy cerca uno de otro, sobre la calle Exhibition Road, y junto también al Victoria & Albert. Ah, y como suele ser el caso con los museos londinenses, ambos son gratuitos y enormes. Pésima idea visitar más de uno de ellos en un mismo día, mas a mí no me quedaba alternativa dado que hoy era mi última jornada completa en la capital del Reino Unido.

¿Que por qué hoy era el peor día para visitar un museo? Pues porque hoy ha sido el primer día que abrieron los museos luego de haber estado cerrados por cinco días seguidos, debido a la cadena de feriados festivos que hubo aquí. Y a eso hay que sumarle el hecho de que esta semana los chicos no tienen colegio, con lo cual sus padres tienen que encontrar actividades para hacer con ellos, e ir al museo de historia natural lleno de animales fantásticos y dinosarios, o al museo de ciencias repleto de actividades fascinantes como simuladores de vuelo, galerías interactivas y juegos didácticos, son el plan perfecto para pasar una linda jornada en familia.

Así que como te podrás imaginar, ambos museos estaban desbordados de gente hoy, sobre todo de familias con niños pequeños, e incluso —increíblemente (o al menos yo no lo entiendo)— muchos bebés, y por consiguiente muchos carritos por todos lados que había que ir esquivando. Pero de vuelta: no me quedaba alternativa que ir hoy. Menos mal que las entradas ya las tenía sacadas desde hacía varios días, si no es probable que ya habrían estado agotadas.

En fin, suficiente charla introductoria. Pasemos a las fotos, empezando con las del primer museo que visité a las diez de la mañana, hora de su apertura: el Natural History Museum.

Natural History Museum
Detalle de la entrada
Detalle de las paredes, con monos tallados trepándolas.
Hintze Hall, el vestíbulo central.
Jirafa
Mastodonte
Ballena azul
Imilac, meteorito de pallasita (extraterrestre, c. 4,5 mil millones de años)
Buey almizclero, carnero de Dall y caribú
Alce irlandés o ciervo gigante (Megaloceros giganteus)
Elefante africano
Sirenio
Mesonyx, mamífero extinto hace cincuenta millones de años.
Panda rojo
Bulldog inglés y samoyedo (Canis lupus familiaris)
Koala
Tyrannosaurus rex, vestido para las fiestas.
Dromaeosaurus
Huevos de dinosaurio
Oviraptor y troodon
Triceratops
Stegosaurus
Azufre
Roca lunar (anortosita)
Amonites fósiles
Ágata
Plata y oro nativos (i.e. tal cual se los encuentra en la naturaleza)
Pirita
Geoda de amatista
Jade (nefrita)
Minerales de cobre: azurita, cuprita y malaquita.
Escalera mecánica atravesando un planeta
En un supermercado japonés (un simulador de terremoto)
Alabaster tazza
Felino de dientes de sable (Smilodon). Especie extinta hace doce mil años.
Rueda de colores de gemas
Diamantes
Más diamantes
Ópalo
De izquierda a derecha: chimpancé macho, Australopithecus sediba, mujer humana moderna.
Charles Darwin
Una habitación más llena de minerales y piedras preciosas (como si no hubiese visto ya suficientes en otras partes del museo). La pasé rápido y fui directo «la bóveda», que quedaba al fondo y era una pequeña sala con las joyas más valiosas.
Rain in sea water. Berilo, variedad aguamarina, 898 quilates. Rusia, 1868.
Meteorito marciano
The Devonshire Emerald. Berilo, variedad esmeralda, 1384 quilates. Muzo, Colombia.
The Ostro Stone. Topacio (azul intenso), 9381 quilates. Minas Gerais, Brasil.
Secuoya gigante (Sequoiadendron giganteum). Organismo vegetal más grande del mundo.
Detalles del cielorraso
Detalles de paredes y ventanas del primer piso

A las 14:15 salí del museo, tras cinco horas de recorrida.

Como son demasiadas fotos las que tomé hoy en cada museo (dado que eran inmensos), decidí que las del museo de ciencias las voy a dejar para una segunda parte de esta entrada.

Ame,
Kato